Las dos caras de la propuesta del diputado Bonilla
Revista Comunica 13 marzo, 2019 0Las dos caras de la propuesta del diputado Bonilla
La propuesta de disminución de diputados en la Asamblea Legislativa conlleva algunos beneficios, pero también puede tener consecuencias negativas en la representación proporcional.
Por Rebeca Abrego, Pamela Gámez y Natalia Gómez
El diputado independiente Leonardo Bonilla defiende su propuesta de reducir el número de diputados de 84 a 60. Ha realizado algunas convocatorias para recolectar firmas de los ciudadanos que están de acuerdo con ella, pero las voces críticas han comenzado a salir, por lo que es importante conocer sobre los efectos que esta modificación del Código Electoral podría tener en diferentes ámbitos.
La propuesta de Bonilla comienza citando los Artículos 78 y 85 de la Constitución de la República, donde se establece la igualdad de votos y el sistema político pluralista que se ejerce en el Estado salvadoreño. Con base en esto, se impulsa la reforma del Código Electoral para la disminución de los diputados.
El documento presentado por Bonilla propone que el Artículo 10 del Código Electoral establezca que las circunscripciones sean municipales y nacional, omitiendo la circunscripción departamental. De igual manera, promueve el cambio del Artículo 13, para establecer que la Asamblea esté compuesta por 60 diputados y, además, pide que el Tribunal Supremo Electoral determine los límites territoriales de cada una de las circunscripciones.
El diputado por la Gran Alianza Nacional GANA, Francis Zablah, es uno de los políticos que firmaron en apoyo a la propuesta del diputado independiente. Sin embargo, declara que, a pesar de haber dado su firma, no está de acuerdo con la recolección de estas. “Eso se llama ser populista…, pero yo le firmé cuando me la llevó. Y estoy de acuerdo en que sí se puede reducir. Si quieren dejar diez diputados, dejen diez diputados. En lo que no estoy de acuerdo es en hacer publicidad de esto”, opinó el parlamentario.
Por el contrario, Osiris Luna Meza, otro diputado por GANA, expone las expectativas que tiene ante esta propuesta. Las principales razones por las que ha brindado su apoyo son: “el ahorro económico sustancial, que puede ser redireccionado a seguridad, salud y educación; el punto de vista legal, que explica la razón fundamental del por qué la propuesta reduce el número de diputados a 60 y, por conseguir una mayor representatividad con el posible reacomodo de las circunscripciones de diputados. “Hay que hacer lo que la población en realidad demanda. Si esa es la vía que la población también necesita, vamos a hacer las cosas necesarias para que cambie nuestro país”, declara Luna.
Por otra parte, el abogado constitucionalista, Enrique Anaya, opina que la propuesta debe ser examinada a totalidad antes de ser firmada, para no caer en un proceso improvisado. “Yo entiendo la queja de los ciudadanos frente al funcionamiento de la Asamblea, pero el problema no se soluciona al reducir el número de diputados”, asegura Anaya.
Anaya opina que la reducción de costos no es razón suficiente para que la propuesta sea completamente favorable. “Durante el período de 18 años, donde se mantuvo un número de 84 diputados, el presupuesto de la Asamblea pasó de 13 millones de dólares a 59 millones. ¿Qué es lo que ha pasado? Han contratado más asesores, más empleados, más activistas políticos. El problema, en realidad, no está en el número de diputados; el problema está en todo lo demás que se está creando. El factor económico no es lo esencial para determinar el número de diputados… Lo importante es la calidad de diputados”, opina Anaya.
El abogado considera que la manera de configurar las circunscripciones electorales, de fortalecer a los partidos políticos para que tengan un mayor rol y asegurar que los diputados cumplan bien su trabajo son, en realidad, los factores importantes. “No creo que con reducir el número haya mayor representación social, si actualmente cada diputado representa alrededor de 72,000 ciudadanos… No me parece una razón de peso sea: reduzco representatividad para reducir dinero”. Además, opina que es necesario establecer mecanismos para que la población pueda estar directamente en comunicación con sus representantes y donde pueda potenciarse la participación ciudadana.
Por otro lado, el politólogo Álvaro Artiga expone que la modificación se puede prestar a algún tipo de manejo a favor de un partido político. “Va a ser el Tribunal quien lo decida. La determinación de esa circunscripción se puede hacer de tal manera que favorezca a un determinado partido, sabiendo dónde están los votantes de los partidos. Entonces, se genera una circunscripción y ganan los diputados asignados. No dice ni cuántas circunscripciones serán oficialmente, sino que el Tribunal determinará”, opina el politólogo. Además, agrega que esta decisión puede traer efectos secundarios a la sociedad, como la falta de representación proporcional.
El abogado constitucionalista agrega que la propuesta debe ser mejor estudiada. “La base del sistema electoral debe ser la población. Hace doce años no tenemos un censo… Francamente, me parece que no están dadas las condiciones políticas para ello [para aceptar la propuesta] y es seguir actuando política y jurídicamente de forma improvisada. ¿Cómo vamos a distribuirlos si no tenemos ni siquiera un censo actual?”, se pregunta Anaya.
El diputado Leonardo Bonilla asegura que la propuesta no nace solo para decirle al pueblo lo que quiere escuchar, y asegura que la medida es totalmente viable. “Solo requiere una reforma al Código Electoral, y no a la Constitución. Además, se necesita que 43 diputados estén a favor, que se analice si 60 diputados pueden representar a la población, que se analicen las circunscripciones… Es un estudio técnico muy fundamentado, a diferencia de otras tres propuestas parecidas que se han presentado anteriormente… La hemos trabajado más allá de plantear un documento y presentarlo en ventanilla; lo hemos fundamentado”, expresa el diputado.
Además, Bonilla considera que, a través de la propuesta, se podrá asegurar el voto igualitario, y ya no habrán votos “más caros”, al impedir que diputados salgan electos con menor votación que otros en algunos departamentos. Y, de acuerdo a esto, al haber circunscripciones más grandes, más partidos políticos e inclusive, diputados no partidarios tendrán oportunidad de ser electos; por tanto, asegura que habrá más pluralismo. No obstante, ya que el Tribunal decidirá, acepta que la propuesta podría tener algunos cambios al final.
Es importante analizar cada punto de la propuesta, para tomar la mejor decisión a la hora de apoyarla. La representación social podría verse afectada, según la opinión de Enrique Anaya, pero esta modificación podría traer consigo la protección al voto igualitario. Lo escrito en la propuesta abre la posibilidad de que el TSE dicte si habrá mayor o menor cantidad de circunscripciones y cómo serán distribuidas. Los salvadoreños están firmando por esto último, no exactamente por lo que planea Bonilla.