El Salvador tiene alto nivel de inseguridad alimentaria
Según el SICA, 7.3 millones de personas se encuentran en crisis o emergencia por inseguridad alimentaria aguda en la región centroamericana. Los gobiernos tienen el desafío de tomar acciones para evitar que se profundice.
Por Sofía Barillas
Los sucesos que marcaron el año 2020 dejaron consecuencias inmediatas en la seguridad alimentaria en la región, en el corto y también a largo plazo. Según un estudio realizado por el Sistema de Integración Centroamericana SICA, la pandemia del covid-19 y las tormentas tropicales provocaron pérdidas de alimentos en tres países centroamericanos, entre estos El Salvador.
Debido a esto, “el pulgarcito de América” resultó con un nivel significativo de inseguridad alimentaria, sobre todo en las zonas en que las familias dependen únicamente de la agricultura y la pesca. Según el informe, 684,000 personas (10 % de la población analizada) se encuentran en crisis alimentaria y requieren acciones urgentes. De estas personas, 589,000 se encuentran en crisis (Fase 3) y 95,000 en emergencia (Fase 4). De junio a agosto de 2021, se estima que 1.04 millones estarán en crisis o emergencia por inseguridad alimentaria aguda.
El secretario General del SICA, Vinicio Cerezo, expresó que la situación es preocupante y se debe trabajar fuerte “Para superar los retos en los próximos años es clave apoyar de forma estratégica, sistemática y focalizada a los pequeños y medianos productores agrícolas y de la pesca de la región; para que Centroamérica se consolide como una importante región productora de alimentos de forma sostenible”, añadió Cerezo.
Los miembros del SICA decidieron tomar acción y con el Plan de Contingencia Regional frente al Coronavirus, aprobado por más de US$1,900 millones, se apoyó a los jefes de Estado y de gobierno para dar una respuesta a la crisis. Sin embargo, aseguran que cada país debe buscar una respuesta antes que el problema se agudice.