La Secretaría Nacional de Arte y Cultura del FMLN presentó en noviembre de 2012 una propuesta de ley que vela por la cultura y arte de El Salvador, la cual fue aprobada en agosto de 2016. A un año de aquel suceso denominado histórico, el diputado efemelenista Omar Cuéllar aclara algunas dudas.
Por William Hernández
¿Cómo nace la Ley de Cultura desde la Secretaría de Arte y Cultura del FMLN?
La propuesta de Ley de Cultura nace a raíz de la necesidad que se vio en la población. Se observó la falta de una ley que viniera a regular todo lo que tiene que ver con materia cultural. Más de 190 años de existir como república pero no teníamos una ley de cultura. Tenemos una ley penal que castiga los delitos que hemos cometido pero no teníamos una ley de cultura que fomente los valores culturales, que rescate la historia, que reconozca los pueblo indígenas y la cultura ancestral, que dé valor a todos esos esfuerzos que se están realizando en los municipios en materia cultural. Tener una ley de cultura significa que ahora el Estado está en la obligación de crear las políticas, los planes, los programas y los proyectos orientados a fomentar la cultura en el país.
¿Cuáles son los ejes principales de esta ley?
Es una ley orientada a fomentar la cultura. Algo importante es que reconocemos la lengua náhuatl como propia, reconocemos los derechos de los pueblos indígenas, le damos a las municipalidades la facultad de poder invertir en materia cultural y mejorar lo que ya están haciendo. Creamos el Fondo Concursable para la Cultura y el Arte (FONCCA) que va a financiar el tema de cultura y que este fondo va a tener una fuente de financiamiento primaria que se llama el Fideicomiso para la Cultura. Ya le pusimos los primeros recursos de un millón de dólares a este fideicomiso y todos los años se va a ir incorporando más recursos de manera que algún día podamos estar haciendo una inversión importante.
También se crea la Escuela Superior en Artes. En los años 70’s se eliminó el bachillerato en artes y la mayoría de profesionales en las últimas décadas, en materia cultural, les ha tocado ir fuera del país porque borramos del mapa, en estudio, todo lo relacionado con aspectos culturales.
¿Quiénes apoyaron esta ley?
Hay aspectos en los cuales los partidos de derecha tenían sus reservas, especialmente lo que tiene que ver con el reconocimiento de la cultura y de los valores. De todo lo que tiene que ver con los pueblos originarios, los pueblos indígenas. Hubo algunas dificultades en ese tema pero al final todos tuvimos la capacidad de ponernos de acuerdo.
¿Cuáles son los desafíos que enfrenta esta ley?
Primero, que debemos de crear todo el andamiaje orientado al fomento, la promoción de la cultura en el país. Yo sueño con seguir el modelo de otros países que hasta en municipios pequeños tienen un teatro. ¿Dónde hay museos? En las mismas ciudades. En otros países uno conoce experiencias donde, por muy pequeño que sea el municipio, ahí está el museo de la ciudad y ahí está una persona que se encarga de escribir la historia del lugar. Ese es un sueño para nosotros. El rescate de nuestra cultura ancestral es uno de los retos. Ha habido visiones y gobiernos que han tratado de invisibilizar a nuestros pueblos indígenas. Incluso se han atrevido a decir que no existen más pueblos indígenas. Hace falta que las municipalidades, el gobierno central, las ONG’s, las ADESCO, las comunidades incluyan dentro de sus planes de trabajo el componente cultural. Todo el mundo está preocupado por resolver el problema del agua, de la energía eléctrica, el problema de las calles, y es una lucha válida de todos los días, pero debemos incluir el componente cultura. Lo podemos tener enfrente pero no nos damos cuenta.
¿Por qué se ha ido atrasando el tema cultura en el país?
Sencillo, porque la cultura ha sido negada a la mayoría de los pueblos. La cultura ha estado relegada a un grupo económico y social privilegiado. Ha llegado el momento de diseminar y hablar de cultura a lo largo y ancho del país. La cultura ha sido un privilegio en el pasado. Ahora debemos de popularizar la cultura. Debemos de llevarla hasta el último rincón. La familia más humilde debe saber qué es cultura.
¿Qué actitud deben tener los salvadoreños ante esta ley?
Los derechos culturales son fundamentales. Entonces, creo que ha llegado el momento de que los salvadoreños empecemos a hablar de nuestros derechos culturales. En esa medida las diferentes instancias vamos a ir incluyendo ese componente cultural. Ha llegado el momento que abarrotemos los parques de libros, de pinturas, con expresiones culturales como la danza pero eso significa tener una actitud distinta frente a la cultura. Los ciudadanos deben apropiarse de esta ley.