Eduardo Ventura, Ingeniero Industrial de la UCA.
Por Sara Zelaya
Escogí estudiar en la UCA, la especialización de Ingeniería Industrial, porque pensé que era un reto y que al final iba a tener su recompensa y así fue.
Cuando me gradué junto a un compañero, decidimos armar nuestra propia empresa: J.C. Ingeniería. Ahora somos socios, él se ocupa de la infraestructura y yo de la energía. El mayor beneficio que me ha dejado la universidad es que me ha permitido dar una identidad a nuestra empresa, a sabernos defender en el campo laboral. Aprendí a tener un criterio muy variado, una noción de todo y a este propósito me ayudaron las asesorías que recibí de parte de una de mis catedráticas.
Entendí que cuando uno llega a cubrir un cargo, tiene que ir mejorando los recursos, el tiempo y los beneficios. En el trabajo esta ha sido la mayor influencia: ver algo, medirlo y luego comenzar a implementar cambios hasta dejarlo en una condición mejor de la que se encontró.
También me ha permitido tener una visión social y responsable de las personas que son nuestros colaboradores. Tratamos que tengan un empleo con beneficios, de incentivarlos para que decidan quedarse con nosotros.
En el transcurso de la carrera hubo materias que me dejaron una muy buena experiencia, y lo curioso es que las más difíciles son las que más me han ayudado en mi vida laboral.
Recuerdo al ingeniero Eduardo Escapini, el ingeniero Daniel Sosa, Laura Orellana y Samuel Castro quienes han dejado un legado en la universidad.
Si pudiera cambiar algo, me gustaría que para alguien que tenga una vocación emprendedora, sería bueno realizar un programa de emprendimiento para alumnos y ex alumnos porque es una universidad que ha hecho varios cambios y por eso tiene que ir en constante evolución.
